viernes, 14 de septiembre de 2012

Fragmento de paz

Está mañana tocaron a mi puerta, baje mesuradamente las escaleras ya que es raro que alguien me visite. Antes de abrir la puerta mire por la ventana, no vi a nadie entonces abrí la puerta y ahí estaba parado, esperándome. Me miraba fijamente a los ojos, era una lucha constante de miradas, las palabras sobraban.

Después de mucho pensarlo decidí invitarlo a pasar, dije para mis adentros "adelante, ¿qué más podría pasar?". Estuvimos quince minutos estudiándonos el uno al otro. Se aclaro la voz y me dijo: "¿qué tal tú nueva vida? ¿es lo que esperabas?", para esto involuntariamente sonreí. En ese pequeño instante me paso por la mente toda una vida desaprovechada y mal gastada.

Me invito a dar una vuelta y yo acepte gustosa, le dije lo triste, frustrada y cansada que me sentía de luchar. En ese momento me apoyo en sus hombros y dijo tan dulcemente que jamás lo olvidaré "Tranquila, lo superarás. Este es el inicio de una nueva vida, de TÚ vida y yo estaré ahí contigo". Mi alma descanso al escuchar esas palabras y lo único que quería era abrazarlo, ya que hay acurrucada me sentía segura y protegida.


sábado, 1 de septiembre de 2012

Tristeza

Sé que he cambiado y mucho a lo largo de estos años, han sido días muy felices y otros de mucho desvelo y trabajo. Lo que me alegra recordar es que esa persona siempre estuvo a mi lado, aún cuando no la quería y me daba un poco de miedo su apariencia.
 
Ahorita que lo pienso es tonto dejarse llevar por las apariencias y ser prejuiciosa. Poco a poco me fue ganando y abrió en mi corazón una puerta que siempre he procurado cerrar.
 
Siento que me ha apartado de su vida, ya no me habla como solía hacerlo. Sólo oye lo que digo, si sólo oye, no me escucha. Odio cuando siempre está ocupada, cansada y nunca tiene tiempo para mí. Las pocas ocasiones en que logró verla y estar con ella siempre está distante, nuestras platicas no son trascendentales y me duele mucho cada vez que la veo partir.
 
Ya es tarde, hemos unos pocos en la oficina que no nos quieren en nuestra casa. Será mejor que vaya porque muero de hambre y deseaba tanto verla este día...